23 dic 20218 Min. de lectura

Pal Dan Gum (ChiKung)

Actualizado: 20 abr 2022

Los 8 movimientos de seda o fáciles. Pal Dan Gum.

Pal Dan Gum es un conjunto de ocho ejercicios de qigong conocidos y utilizados en China y Corea durante miles de años para promover una salud radiante para personas de todas las edades y habilidades. Estos ejercicios a menudo (son una versión) se conocen como los "ocho movimientos de seda" e históricamente se han utilizado para una longevidad saludable y como ayuda para el desarrollo espiritual. Proporcionan un método natural para mantenerse activo y en forma mientras aumentan la fuerza vital del cuerpo. Al finalizar, uno se siente renovado, relajado y energizado. Los médicos orientales tradicionales han recomendado y siguen siendo recomendados para aliviar muchos síntomas y dolencias comunes en todos los hospitales de China y Corea.

La práctica de Pal Dan Gum requiere simplemente de cinco a diez minutos al día para mejorar la salud y aumentar la conciencia espiritual y energética. Con la práctica regular, estos poderosos ejercicios purifican el shen (espíritu), fortalecen el jing (esencia vital) y equilibran el qi (que es la energía vital) que fluye a lo largo de las vías meridianas. Estos ejercicios también promueven la salud interna de los órganos y la mejora de la circulación sanguínea. También aumentan la fuerza, la flexibilidad, la resistencia de los músculos y tendones del cuerpo, así como la resiliencia y estructura óptimas de los huesos y las articulaciones.

Breve resumen en imágenes de los movimientos.

Antes de comenzar la práctica de estos ocho ejercicios de Pal Dan Gum, se recomienda que el practicante tome respiraciones profundas lentas, suaves y rítmicas mientras camina tranquilamente durante unos minutos o usa la Meditación estática con “Abrazar el árbol”. Hazlo mientras eliminas pensamientos extraños para calmar la mente y el cuerpo. Asegúrese de respirar por la nariz con la boca cerrada y la lengua tocando ligeramente el paladar, luego exhale por la nariz. Enfoca la mente en el abdomen (a tres dedos debajo del ombligo en Dan Tien) mientras el vientre se expande al inhalar y se desinfla al exhalar, al menos 10 min.

Mientras realiza los ocho ejercicios de Pal Dan Gum, concéntrese completamente en los movimientos, posturas y respiración. Mantenga los ojos mirando hacia abajo mientras se mueve con gracia, lenta y precisión de una postura a la siguiente. Repita cada ejercicio como se indica, pero también siéntase libre de repetir uno con mayor extensión cuando lo desee. Sin embargo, se recomienda que toda la serie de ocho ejercicios se termine en diez minutos.

Ejercicio #1: Defendiendo el cielo. Sostener el cielo con las manos.

Este ejercicio libera qi tóxico de los "triple recalentadores" ubicados en tres áreas del tórax que rigen la regulación de la temperatura dentro del cuerpo. Este ejercicio energiza y mejora la circulación dentro de todos los órganos internos al estimular el meridiano triple recalentador más cálido (activo), también estimula el sistema endocrino.

1. Párese erguido con los pies separados, los dedos de los pies hacia adelante y los brazos a los lados. 2. Gire las manos para que las palmas estén levantadas y levante lentamente las manos por encima de la cabeza.

3. A medida que las manos se encuentran por encima de la cabeza, entrelaza los dedos. Al hacerlo, descienda las palmas hacia abajo.

4. Luego gire las manos para que las palmas estén hacia arriba y empuje hacia arriba con los dedos todavía entrelazados. Mientras haces esto, estira hacia arriba sobre los dedos de los pies y levanta un poco los talones del suelo. Mantenga esta postura estirada durante varios segundos.

5. Luego vuelve a los talones y lleva los brazos hacia abajo y de vuelta a los lados.

6. Repita este ejercicio un total de tres veces.

Ejercicio #2: Tensar el arco.

Este ejercicio expande el pecho para aumentar la capacidad pulmonar y cardíaca y fortalecer los hombros. También equilibra el flujo de qi en todo el cuerpo. También se sabe que previene la aparición de parálisis unilateral que eventualmente podría ocurrir al final de la vida.

1. Párese erguido con los brazos a los lados y respire lenta y rítmicamente desde su Dantian inferior ubicado dos pulgadas por debajo de su ombligo.

2. Pase el pie izquierdo hacia su lado izquierdo para que los pies estén separados por el ancho de los hombros.

3. Dobla las rodillas y abre los muslos para asumir una postura de caballo, lo que significa una postura de equitación. Cruza los brazos delante de ti en las muñecas con el brazo izquierdo delante de la derecha. Hágalo con las manos en los puños, excepto con el dedo índice izquierdo, que está extendido.

4. Como si sostuviera un arco en tu mano izquierda y la cuerda de la cuerda del arco en la mano derecha, empuja hacia fuera tu brazo izquierdo hasta que esté recto. Al hacerlo, gire lentamente la cabeza hacia la izquierda. Tire simultáneamente de su mano derecha hacia el pecho derecho como si tirara de la cuerda. Asegúrate de concentrar tu atención en la punta de tu dedo índice izquierdo. A medida que gira, contenga la respiración durante seis segundos y exhale lentamente mientras comienza a cambiar de posición.

5. Relaje los brazos y vuelva a cruzarlos frente a usted, esta vez con el brazo derecho delante de la izquierda y el dedo índice derecho extendido.

6. Abre el arco de nuevo, esta vez hacia el lado derecho. Repita la secuencia tres veces.

Ejercicio #3: Elevar las manos. Defendiendo el cielo y la tierra

La realización de este ejercicio armoniza la energía del bazo y meridiano del estomago, que funcionan para fortalecer la transformación y el transporte de los alimentos para ayudar en la función digestiva. Este ejercicio también promueve la función de eliminación del cuerpo al proporcionar fuerza contráctil a los meridianos del intestino grueso y delgado que fluyen a lo largo de los brazos. También beneficia Hígado y Vejiga.

1. Párese erguido con los brazos a los lados y los pies separados. 2. Levante las manos al plexo solar con las palmas hacia arriba, las yemas de los dedos tocando ligeramente y

Codos directamente a los lados.

3. Levante la mano izquierda por encima de su cabeza con los dedos apuntando hacia adentro, mientras gira el brazo izquierdo para que su palma mire hacia arriba hacia el cielo. Al mismo tiempo, baje la mano derecha hacia su lado derecho con la palma hacia abajo y los dedos apuntando hacia adentro. Al hacerlo, asegúrese de estirar ambos brazos.

4. Relaja tus brazos y vuelve a la posición inicial. 5. Repita el ejercicio en el otro lado. Hazlo por ambos lados

Y repite este ejercicio tres veces cada uno.

Ejercicio #4: Girar la cabeza y mirando hacia atrás.

Este ejercicio fortalece la energía dentro de los cinco órganos del yin y sus órganos yang asociados. Los cinco órganos del yin incluyen el corazón, el bazo, los pulmones, los riñones y el hígado, mientras que los cinco órganos del yang son el intestino delgado, el estómago, el intestino grueso, la vejiga urinaria y la vesícula biliar.

También se habla de curar los “cinco problemas”: tensión ocular causada por el esfuerzo y las tensiones musculares por culpa de estar sentados, tumbados, de pie y caminando. Y los “siete desordenes”: por los síntomas causados por el miedo, la ira, la inquietud, el exceso de comida, el agotamiento, los escalofríos y el clima extremo.

1. Párese erguido con las manos a los lados y los pies separados. 2. Cruza las manos varias pulgadas delante de tu cara con la mano derecha la más cercana a ella.

3. Tire de las manos hacia los lados y hacia atrás con los brazos rectos y las palmas hacia adelante. Gire la cabeza hacia la izquierda hasta donde vaya sin girar la cintura. Al hacerlo, su hombro izquierdo se hundirá ligeramente más bajo que el derecho.

4. Cruza las manos frente a ti una vez más, pero esta vez con la mano izquierda más cercana a la cara.

5. Repita en ambos lados, tres veces cada uno.

Ejercicio #5: Doblar el tronco y lateralmente. Estirar el cuello.

Este ejercicio fue diseñado para liberar el exceso de fuego del meridiano cardíaco. Esta es una condición causada por la ira y la frustración excesivas, aunque tradicionalmente se dice que una cantidad moderada de fuego en el corazón es natural y saludable. Y por el otro un exceso de fuego produce síntomas como dolor de cabeza, insomnio, agitación, reacciones de furia y elevación de la tensión sanguínea.

Los ejercicios de cuello lo fortalecen, relajarán y le darán flexibilidad

1. Párese erguido con los pies separados por el ancho de los hombros. Dobla las rodillas y abre los muslos para formar una postura de caballo, lo que significa una postura de equitación. Coloque las manos justo por encima de las rodillas con los pulgares hacia adentro.

2. Dobla tu cuerpo hacia el lado izquierdo mientras permites que los hombros y la cabeza se inclinen hacia la izquierda. 3. Vuelva a una posición vertical mientras mantiene su postura de caballo. 4. Dobla tu cuerpo y cabeza esta vez hacia el lado derecho. 5. Vuelve de nuevo a una posición vertical mientras mantienes tu postura de caballorar.

6. Incline la cabeza hacia adelante y luego hacia atrás 7. Relaje su cuello por completo y gire la cabeza primero en sentido contrario a las agujas del reloj y luego en sentido horario.

Ejercicio #6: Tocarse los dedos de los pies, doblarse y estirarse hacia atrás

Este ejercicio fue diseñado para aumentar la flexibilidad de la cintura y las piernas. También estimula la energía de los riñones y aumenta la energía vital para ayudar a prevenir enfermedades. Estos ejercicios también influyen directamente en la energía de la vejiga urinaria, la vesícula biliar y el bazo estimulando sus meridianos.

1. Ponte erguido con los pies ligeramente separados y las manos a los lados. 2. Dobla tu cuerpo hacia adelante mientras mantienes las rodillas rectas.

3. Toca las palmas de las manos en el suelo cuando sea posible y luego agarra los dedos de los pies. Sostenga los dedos de los pies mientras se inclina hacia adelante durante varios segundos.

4. Endereza la espalda y sube lentamente hacia arriba y coloca las manos en la parte posterior de las caderas. 5. Arquea la cabeza y la espalda hacia atrás. 6. Repita estos movimientos de flexión hacia adelante y hacia atrás un total de tres veces.

Ejercicio #7: Puñetazos con ojos enojados

Este ejercicio aumenta la fuerza y vitalidad de la estructura y los órganos internos del cuerpo físico.

1. Ponte erguido con las manos a los lados y los pies ligeramente separados. 2. Da un paso a la izquierda, dobla las rodillas y abre los muslos para formar una postura de caballo, lo que significa una postura de equitación. Coloca los puños en la cintura con las palmas hacia arriba.

3. Abre los ojos muy bien, como si estuvieras enojado. Con el puño izquierdo, golpee a la izquierda y luego devuelva el puño a la cintura izquierda. Mantén los ojos en los nudillos mientras golpeas.

4. Continuando manteniendo los ojos abiertos, golpeando con el puño derecho hacia el lado izquierdo y luego

Devuelve el puño a la cintura derecha.

5. Repita estos dos puñetazos, pero ahora en el lado opuesto.

6. Golpea hacia adelante con el puño izquierdo y devuélvelo a la cintura izquierda. Luego da un puñetazo hacia adelante con el puño derecho y devuélvelo a la cintura derecha.

7. Vuelva a asumir una postura erecta, las rodillas rectas pero los pies todavía separados por el ancho de los hombros. 8. Golpear al lado izquierdo con el puño izquierdo y volver a la cintura izquierda. 9. Golpea al lado derecho con el puño derecho y vuelve a la cintura derecha. 10. Puñeta hacia adelante con el puño izquierdo y vuelve a la cintura izquierda.

11. Puñeta hacia adelante con el puño derecho y vuelve a la cintura derecha.

Ejercicio #8: De pie sobre los dedos de los pies. Elevar talones.

Este ejercicio aumenta la capacidad del cuerpo para soportar influencias de la naturaleza y del cosmos que están fuera de armonía. También fortalecen los órganos vitales, especialmente los del estómago y los riñones.

1. Ponte erguido con las manos a los lados y los pies ligeramente separados. 2. Levante los talones lentamente y mantenga esta posición extendida durante varios segundos. 3. Devuelve los talones lentamente al suelo. 3. Repite dos veces más.

AHORA y después de hacer o antes de los ejercicios realiza esta meditación de Qi Gong sin movimiento "Abrazar el árbol".